Lo cierto es que a estas alturas el Madrid sigue vivo en las tres competiciones. En estas mismas fechas del año pasado ya habían hecho el ridículo contra el Alcorcón y en las próximas semanas el Lyon les apearía de la Champions, pero Pellegrini se apañaba con lo que tenía. Y luchó por la Liga hasta donde pudo. El ingeniero lloró tan poco que se convirtió en el cabeza de turco de una plantilla desequilibrada (futbolísticamente hablando).
Ahora el mal trabajo de Mou es culpa de la plantilla, tanto de sus gestores como de alguno de sus miembros. Y pasa de la cantera… fiel a su estilo. Ayer después del empate contra el Almería se produjo un titular que nunca existió: “El Madrid depende de Pellegrini”. Lo malo, pensarían los merengues, es que no pudo ser. El Barça es un ciclón de juego y goles. Entonces: ¿A qué excusa se tiene que agarrar tanto el Real Madrid como la prensa madrileña para desviar la atención de un empate contra el colista? Pues en los errores arbitrales, en la mano de negra que mueve los hilos desde la federación (Villarato), y en la falta de un 9. Nadie protestará que ayer los jugadores merengues salieron a los Juegos Mediterráneos desmotivados, sin la referencia de un delantero centro y cansados de tantos minutos a sus espaldas. Que desapareció su electricidad, que se desfondó el pasado jueves contra el Atleti en el Bernabéu. Y que realmente no saben ganar (dícese el pasado jueves contra el Atleti), no saben perder (dícese tangana entre Iker y Vargas ayer) y no saben a lo que realmente juegan.
No muy lejos están sus vecinos. El Atleti juega hoy contra el Mallorca, y porque lo hace en casa, que si no estaría apostando por una victoria bermellona sin ninguna duda. El pasado jueves lo vimos en el Bernabéu: sin centro del campo, con un equipo roto y una defensa absurda que regala un gol en el minuto 93. El Kun no lo puede hacer todo, como no lo podía hacer el Niño. Y ahora para más inri se lesiona.
Yo debo anunciar que tengo entrada para el partido de vuelta. Que un servidor lo verá en tribuna lateral y se desgañitará a pesar de que CR7 marque a los 30 segundos de partido (que es probable). Y que no perderé la ilusión de pasar la eliminatoria hasta que el árbitro pite el final del partido (y espero que la madridista que me acompaña no me dé demasiado la lata).
Por otro lado, el Sporting parece que salió de esa mala racha. El Getafe no tiene perdón de Dios por caer por cuatro goles en casa contra un recién ascendido (al que no le va mal), y el Depor se aproxima de nuevo al abismo. Osasuna, Rácing y Málaga deberán seguir luchando.
Felipe Sierra.
