Brembo se mantiene durante la crisis generada por el coronavirus. Y es que la compañía de origen italiano ha reportado un beneficio neto durante el primer semestre de 2020, con ingresos de 951,1% millones de euros (-28,2%), en relación con el mismo periodo del año pasado.
Asimismo, el EBITDA (Ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) ha sido de 143,3 millones (margen en 15,1%), mientras que el EBIT (Ganancias antes de intereses e impuestos) ha sido de 38,8 millones (margen en 4,1%).
Por su parte, los resultados presentados por la empresa también reflejan que las inversiones netas en este periodo de tiempo han ascendido a 73,4 millones de euros, en comparación con el primer semestre de 2019. Así como la deuda financiera neta se encuentra en 597,5 millones de euros (407,2 millones antes de la aplicación del IFRS 16), lo que supone un incremento de 147,1 millones con respecto al 31 de marzo de 2020.
En palabras del presidente de Brembo, Alberto Bombassei: “Los resultados del primer semestre de 2020 aprobados hoy por el Consejo de administración destacan cómo Brembo demostró una considerable resiliencia en un entorno tan complejo, protegiendo sus niveles de margen y su solidez financiera”.
Por ello, la compañía considera “estar bien posicionada para la evolución del mercado”, debido, según explica Bombassei, “a su compromiso con la innovación, la digitalización y la protección del medio ambiente”, pese “a la continua situación de incertidumbre de la industria de la automoción, exacerbada aún más por la crisis que ha impactado en la economía mundial”.
Así, el presidente de Brembo lanza un mensaje de optimismo con respecto al horizonte que se avecina: “Miramos al futuro con confianza, apoyándonos en nuestros sólidos fundamentos y en un ambicioso programa de desarrollo orientado a largo plazo, que nos permitirá reanudar nuestro crecimiento”.