Cetraa ha enviado una nota de prensa con el objetivo de aclarar el verdadero motivo por el que decidieron suspender las negociaciones para su fusión con Conepa. Con el escrito, la junta de la patronal cierra filas en torno a su presidente, Enrique Fontán; señala al entorno de Conepa de filtrar con intereses evidentes -básicamente culpabilizar al presidente de Cetraa de la paralización de las negociaciones- informaciones aparecidas en algunos medios; y pone la pelota en el tejado de Conepa, que se ve de alguna manera obligada ahora a dar un paso al frente.
Y es que, tal y como adelantamos en primicia, el cese de Ana Ávila no se debía a un desacuerdo con los modelos de gestión, como se ha venido especulando durante los últimos días en algunos medios. Esa versión, que ahora desmiente públicamente Cetraa, servía para restar importancia al verdadero motivo para la suspensión de las negociaciones.
Lo ha explicado Cetraa en el comunicado: “En pleno proceso de negociación, Cetraa recibe la información por parte de Ana Ávila, miembro imprescindible de la comisión negociadora de la Confederación, de que ha aceptado una oferta laboral de ASETRA, asociación de talleres de Madrid perteneciente a CONEPA, efectiva a partir del próximo 1 de septiembre”.
Una oferta realizada por Víctor Rivera, secretario general de Conepa, que en Cetraa consideraron intolerable al entender que lo que se pretendía con ella era desnivelar la balanza en unas conversaciones -Ana Ávila era quizá el bastión más importante de Cetraa en esa mesa de negociación- que a partir de entonces han quedado suspendidas.
En pausa, pero no rotas, es lo que explican ahora en la nota enviada. La pelota se encuentra por tanto ahora en el tejado de Conepa. Porque como decíamos –y lo hacíamos también en primicia-, en el seno de Cetraa lo que se exige ahora es que las personas cambien en ese Comité Corporativo que negocie la futura fusión, mirando especialmente a la figura de Víctor Rivera, en quien se ha perdido toda confianza.
Además, en vista de las informaciones aparecidas en algunos medios -que en Cetraa entienden que se producen a partir de filtraciones interesadas del entorno de Conepa-, y con el objetivo de poner todas las cartas encima de la mesa, el pasado 3 de mayo Cetraa llegó incluso a proponer con carácter formal a Conepa la celebración de una Asamblea General con los máximos responsables nacionales y provinciales que desearan acudir, para que allí pudieran “aclararse los posibles malentendidos surgidos a raíz de informaciones no oficiales”. La respuesta sin embargo por parte de Conepa fue negativa, lo que tampoco ayudó a que las relaciones entre ambas entidades pudieran mejorar…
Habrá que ver qué movimiento es el siguiente en una negociación convertida en partida de ajedrez… El objetivo prioritario para Cetraa ahora es poder reanudarlas.
Por último, Cetraa ha querido evidenciar el apoyo total a su presidente, de quien han destacado su “carácter conciliador y cohesionador”, “estableciendo relaciones y llevando a cabo acciones conjuntas con multitud de actores sectoriales” -apuntan en este caso a lo manifestado por Conepa-.