Y es un factor que sin duda afecta a nuestro sector (a fabricantes, talleres y distribuidores), que ve no solo en la mayor antigüedad de los vehículos, también la entrada de nuevas marcas en el mercado, la necesidad de adaptar su oferta a una no tan nueva ya ‘foto’ del parque español.
La media del parque ahora, según datos de Anfac (asociación de fabricantes de automóviles), es de 11,5 años. El 53% tiene más de once años, el 29% se sitúa entre once y quince y un 24% supera los quince años. Parece que aún los planes de incentivos no están siendo suficientes para reducir una edad del parque que ya comienza a ser preocupante. Y es que lo decía Fernando López, de Gipa, hace ahora casi un año cuando se pasaron de vender más de millón y medio de vehículos (en 2007) a poco más de 700.000 (en 2013): “Si en los próximos años no entran en el mercado vehículos ‘jóvenes’, entonces sí que correremos el riesgo de que la cifra de coches descienda de manera preocupante”.
Las ventas de vehículos terminaron el 2014 con la primera subida desde el inicio de la crisis, arrancó el 2015 con un crecimiento del 27,5%, pero la edad del parque no ha mejorado. El agotamiento del PIVE (en su última edición, la séptima, que nació ya con más del 91% del presupuesto comprometido) parece que ha frenado las ventas de vehículos nuevos durante la primera quincena de abril, en el que la caída ha sido de un 44%.
“El sector del automóvil no debe estar permanentemente incentivado”, comenta Juan Antonio Sánchez Torres, presidente de Ganvam, “pero ya estamos viendo que hasta que la curva económica se normalice del todo, serán las ayudas al comprador las que mantengan la inercia positiva de las ventas”.
En la actualidad más de once millones de conductores en España manejan vehículos que tienen más de diez años de edad, una cifra que sitúa a España como el país con el parque automovilístico más antiguo de los cinco mercados principales de Europa (Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y España).
