Hasta hace 15 días se paseaba por la empresa. Como de costumbre, entraba en el taller, charlaba con los trabajadores, asistía a una reunión de la Junta Directiva… Pero Remo Corghi luchaba desde hacía tiempo contra la enfermedad y en la madrugada del viernes al sábado 30 de julio su corazón se detuvo. Tenía 81 años.
Remo Corghi había fundado en 1954 la empresa Corghi Elettromecanica Correggio con su hermano Erminio, con el que trabajaba desde 1947.
El gran invento de Erminio Corghi fue la desmontadora de neumáticos, un producto tan innovador en 1961 que pronto necesitó un red internacional de distribución. Y en eso jugó Remo el papel esencial.
Desde entonces Corghi no ha dejado de crecer y es hoy uno de los mayores fabricantes del mundo de equipos de taller: desmontadoras de neumáticos, equilibradoras de ruedas, alineadores de dirección, elevadores de vehículos y equipos de ITV, entre muchos otros. Hace unos años la familia Corghi creó el grupo industrial Nexion, que incluye a las marcas Mondolfo Ferro, Simpes Faip, Sice, Tecnomotor, HPA y Teco. Corghi tiene filiales en Francia, Alemania, EEUU y China. La empresa Sánchez Pamplona es el importador exclusivo de Corghi en España desde 1962.
Cincuenta años al pie del cañón
La aventura de los hermanos Corghi comenzó en la pequeña localidad italiana de Correggio en 1948 cuando, fascinados por los primeros magnetófonos de cinta fabricados en Estados Unidos, diseñaron y fabricaron uno que reproducía el reclamo de las codornices: los cazadores lo utilizaban por la noche para atraer a las aves y de ese modo las batidas tenían al día siguiente el éxito garantizado. Cuando unos años después se prohibió el uso de ese tipo de reclamos electromecánicos (cuya imagen sigue presente en el actual logo de la compañía) los hermanos Corghi ya tenían puestos sus ojos en otros sectores. Por ejemplo en el de la maquinaria para los géneros de punto, dado el crecimiento de las empresas del sector ubicadas en la vecina Carpi. Pronto llegaron las bobinadoras, las enrolladoras y las devanadoras, un sector productivo en el que Corghi todavía se mantiene a la vanguardia.
En 1958 Erminio Corghi visitó el taller de automóviles de un amigo suyo y comprobó que los utensilios que usaba para el servicio eran escasos e inadecuados. Así nació, en un primer momento, la equilibradora de ruedas, en la que el gráfico del desequilibrio podía ya leerse en la parte delantera de la máquina. Un par de años después inventó la desmontadora de neumáticos anterior al sistema Artiglio. El principal objetivo de Erminio Corghi era sustituir el esfuerzo humano por el de la máquina. La Artiglio (palabra italiana que significa garra), comercializada a partir de 1962, fue la primera desmontadora de neumáticos del mundo. Coincidiendo con el periodo de crisis de la industria de los géneros de punto, en 1965, Corghi se centró en las desmontadoras de neumáticos, no sin haber producido antes, además, tractores, estabilizadores de tensión para televisores, lavadoras y lavavajillas.
“Nuestras máquinas –decía Remo Corghi (en la foto)- son rojas, como los Ferrari, y no es casualidad: colaboramos con la casa del Cavallino desde 1973 con todos los sistemas de montaje/desmontaje y equilibrado”. A decir verdad, toda la Fórmula 1 utiliza equipos Corghi, y no sorprende: el fabricante italiano fabrica hasta desmontadoras de neumáticos especiales para los neumáticos de los aviones.
Mi carrera profesional comenzó en el año 1976 instalando desmontadoras de ruedas Artiglio en la firma Exclusivas Industriales Sánchez Pamplona.
En una sola ocasión tuve el honor de saludar al Sr. Remo Corghi, ahora al enterarme de su fallecimiento he sentido la necesidad de escribir este comentario.
Descanse usted en paz Sr. Remo con la satisfacción de un trabajo bien hecho y un sincero pésame a la familia.