Durante la Semana Santa Liqui Moly realizó una donación de un millón de euros en material en Alemania, y ahora, dada la gran acogida de la iniciativa, el fabricante anuncia una nueva donación de dos millones de euros.
«Nos enorgullece saber que los hospitales, servicios de rescate y de bomberos pueden asistir a la población apoyándose en productos fabricación propia que hemos donado», asegura Ernst Prost, gerente de Liqui Moly.
¿Y qué más?
En cuanto a su actividad, Prost afirma que «los pedidos recibidos siguen siendo pocos, pero al menos siguen entrando a diario. Continuamos produciendo sin cesar y ampliando el stock en nuestros almacenes. Además, seguimos manteniendo nuestros compromisos publicitarios: anuncios a doble página, ofensiva en todas las redes sociales y lanzaremos 200 spots publicitarios más hasta mediados de año, lo que supone unos cuantos millones de inversión adicionales».
Y es que, el gerente de Liqui Moly asegura que la compañía se guía por una estrategia para «mantener en pie a la empresa y salir con fuerza una vez superada la crisis, contando con un aumento de la demanda en un espacio de cuatro a seis semanas. A partir de ese momento, el negocio se establecerá con aquellos partners que puedan garantizar el suministro y Liqui Moly será uno de ellos, porque seguimos produciendo y tenemos nuestro stock a máximos para garantizar una pronta respuesta. Esa ha sido la estrategia desde el inicio de la epidemia: trabajar al 100% para que los clientes, cuando termine la crisis, nos elijan por las razones de siempre, pero también por la capacidad de respuesta y por la confianza transmitida durante esta crisis .