«Desde que estoy aquí todo lo que ha pasado es bueno. El mercado está muy difícil pero seguimos avanzando. Concilio muy bien la familia y el trabajo. Encantado. Se va reduciendo el mercado del amortiguador a empresas punteras más competitivas y mejor preparadas, creo que estoy en la mejor y encuentro rendimiento de estar en la mejor», nos cuenta.
Lluís Tarrés es director de grandes cuentas del fabricante de amortiguadores KYB, además de mantener la responsabilidad sobre su zona (Cataluña, Valencia, Aragón y Baleares). Fue la mano derecha de Carlos de Aizpuru en QH, pero en enero se fue a “echar una mano” a Juan Carlos Díez, director general de KYB en España.
Pues sí, ahora mismo me vienen solo dos compañías que se dedican exclusivamente al amortiguador. Es que hay que ver …
Macu, eres un fresco pero tienes razón, ¡en esta vaina de los amortiguadores al final vamos a quedar dos!