Ese es el objetivo: aumentar la capacidad de la planta, en la que tienen previsto fabricar doce nuevos productos. De los 22 millones que tiene previsto invertir el fabricante en su planta barcelonesa, catorce irán destinados directamente a hacerla más productiva y ocho a la investigación de nuevos componentes.
Para 2016 esperan que la plantilla se duplique y supere los 420 trabajadores.