Con esta nueva fábrica, ZF apuesta por Malasia como “un mercado con un gran potencial de futuro”. En ella, el fabricante alemán ensambla ya las piezas de los ejes que llegan desde otras factorías que ZF tiene repartidas por el mundo.
“La nueva fábrica de ensamblaje de Kulim es una ampliación de nuestra red mundial de plantas, que aprovecha la ya existente capacidad de producción y nuestra experiencia en la región Asia-Pacífico”, explicó Peter Holdmann, responsable de los negocios internacionales de sistemas de ejes dentro de la división Técnica de Chasis de Automóviles de ZF.