“Envié la semana pasada a Gecorusa ese burofax solicitando la baja para curarme en salud, ya que el reglamento comercial pide un aviso de 120 días pero en los estatutos, si no recuerdo mal porque no dispongo de copia, se exigen cuatro o seis meses. Avisar antes del fin de junio era lo correcto para, si finalmente decido dejar el grupo, no ser penalizado por ello”, detalla.
“Me comprometí a seguir hasta fin de año y por lo menos hasta fin de año estaremos seguro. Así debe ser también según los compromisos adquiridos con los proveedores, que nos respetaron las condiciones después de las recientes bajas. Además de que marcharme ahora sería perjudicar al grupo y es lo último que quiero”, añade Adalberto Dorta.
“¿Que qué debería pasar en la próxima asamblea? Que el consejo presente propuestas concretas que nos ayuden a ser competitivos en el mercado. Nada más, y nada menos. No es de recibo, por ejemplo, que el G9 no se haya reunido desde hace un año a pesar de que hay condiciones que podrían mejorarse. Y de Repuestos Doral dependen 35 familias”, detalla Dorta a autopos.es. “¿A qué grupo iré si finalmente me marcho? Ni idea. En primer lugar deberé decidir si me voy”, concluye el gerente de Repuestos Doral.
Estimado Miguel Ángel, no entraré en discusiones contigo sobre tus dotes de adivino, solo quiero comentarte que estudio varias opciones, entre ellas la própia GECORUSA si se cambian las condiciones, todas muy respetables, y tengo tiempo para hablar con todos y ver las posibilidades de los proyectos, el problema es que a mi me pagan por dar beneficio para los accionistas de DORAL, por pagar bien y tratar mejor a los emplados de DORAL y por dar viabilidad al futuro de la misma empresa y no por estar con amigos y ser politicamente correcto. Recibe un cordial saludo y cuando quieras mi teléfono o la sede de repuestos DORAL esta a tu disposición.
Pues yo creo que lo tiene decidido, pero que se está curando en salud por si acaso. Y CGA acabará siendo su destino.