Una cita que se pretende tenga continuidad. Y no solo. Anuncian una segunda edición en 2020, y, aunque en la primera haya tenido un muy marcado carácter local, esperan que llegue a significar algo parecido a lo que en su día fue Expomóvil: “Somos muy cautos y vamos con precaución, pero la idea era abrir una brecha por la que seguir avanzando. Creemos que una feria fuerte en Cataluña es necesaria”, explicaba Pasqual Moya, presidente del Gremi de Terrassa. La idea será planteada a otras federaciones catalanas (y no sólo de talleres) para tratar de buscar el modo de avanzar en estos planes.
Por el momento buena parte de las empresas expositoras han mostrado su interés en volver a exponer y cuentan que otras que no han estado se han mostrado dispuestas. Habrá que ver hasta dónde llegan.
Y eso que parecía que su planteamiento no iba más allá de abrir a la generalidad de recambistas y talleres de la zona una feria similar a las ‘privadas’ que podían organizar algunos grandes distribuidores (hasta había una gran barra de bar y paella)…
De momento, distribuidores de recambios respondieron cuatro, dos tradicionales, EUMA (socio de GAUI) y Silvestre; y dos de los avenidos, PRO Service (VW) y DRO. Además, se dejaron ver por los pasillos de la feria algunos visitantes relevantes, como el presidente de los recambistas catalanes Juan José Rodríguez (gerente además de Ribot Recanvis, Serca), invitado directamente por los presidentes de las patronales organizadoras.
