Según el informe ‘Reciclando la posventa’, elaborado por Solera, la facturación del sector ascendió en 2023 a 14.100 millones de euros, sumando en este concepto tanto los negocios de carrocería y mecánica como la facturación por piezas, componentes, materiales de pintura y mano de obra. Esta cifra supone un repunte del 6,4% en comparación con 2022 (13.251 millones de euros), un crecimiento provocado casi exclusivamente por el encarecimiento de los recambios.
Y es que los datos de Solera señalan que el importe medio del recambio creció en el último año un 6,2%, impulsando el negocio de mecánica hasta los 9.334 millones de euros (un 5,1% más que en 2022) y el de carrocería hasta los 4.766 millones (un 9% más). Este 6,2% de aumento en el importe medio del recambio se suma al 2,8% experimentado en 2021 y al 12% de 2022, por lo que acumula un repunte claramente superior al 20% en los tres últimos años.
Como consecuencia de ello, el recambio supone ya casi seis de cada diez euros que mueve el sector, con una cifra de negocio que se sitúa en el entorno de los 8.000 millones de euros. Sin embargo, si tenemos en cuenta que el importe medio de la reparación ha crecido un 17% desde 2020, por debajo del incremento experimentado por el recambio, todo parece indicar que los talleres no están aplicando una subida similar en la mano de obra (Solera no ofrece datos de la evolución de la mano de obra en el área de mecánica, pero sí en la de pintura, donde el repunte acumulado se sitúa por debajo del 7%).
Hacen falta más reparaciones
Más allá del crecimiento en la facturación provocado por el encarecimiento del recambio, Solera señala que es “clave y saludable” que este repunte venga también de la mano de un mayor número de reparaciones, aunque vamos a la tendencia contraria. Y se apoya en la antigüedad del parque para explicarlo: “El parque español tiene una antigüedad media de 14,2 años, pero si nada cambia nos acercaremos a quince o dieciséis años en un corto plazo. Y un coche de quince años recorre en torno a 12.000 kilómetros anuales, frente a los más de 18.000 kilómetros de uno de hasta cinco años. A menos rodaje, menor desgaste y mantenimientos”.
Según los datos de MSI referidos por Solera, de los 29,1 millones de vehículos que conforman el parque (incluyendo turismos, 4×4 y comerciales ligeros y medios), 13,6 millones tienen más de quince años. Además, cinco millones aún tienen matrícula provincial, por lo que tienen más de 24 años.
Un dato preocupante si tenemos en cuenta un vehículo seminuevo genera tres veces más negocio que uno de más de quince años. Solera le pone números: un coche de hasta cinco años recorre 18.627 km anuales de media, pasa por el taller 1,6 veces al año y genera una facturación de 903 euros. Por su parte, los coches de más de quince años recorren 12.056 km, pasan por el taller una sola vez al año y generan 307 euros de facturación.
