La facturación de los distribuidores de recambios se mantiene al alza, aunque con síntomas de estancamiento. Así lo ponen de manifiesto los resultados del estudio elaborado por Ancera correspondiente al primer trimestre: las empresas consultadas han aumentado su volumen de negocio un 3,3% de enero a marzo en comparación con el primer trimestre de 2023 -se esperaba un 4%-, pero han experimentado una caída del 2,7% respecto al último trimestre del año pasado. Aun así, las expectativas son positivas.
Y es que a pesar de que la demanda no crece al ritmo de los últimos años, la distribución espera cerrar 2024 con un crecimiento cercano al 4% en comparación con 2023, un dato que superaría tanto al del PIB, estimado en el 1,5%, como al de la inflación, que se prevé en el 3%. De hecho, el sector espera que estos crecimientos de entre el tres y el cuatro por ciento se mantengan estables en los próximos trimestres, mostrando así una tendencia constante durante todo el ejercicio. En consecuencia, la gráfica será mucho más plana -o estable si se prefiere- que en 2023, con una evolución que fue muy diferente por semestres.
“Continuamos con una desaceleración”
Con estos datos en la mano, Carlos Martín, secretario general de Ancera, no esconde que “continuamos con una desaceleración trimestral”, ya que en el último trimestre de 2023 “el crecimiento fue del 7%” en comparación con el mismo periodo de 2022. Eso sí, no podemos olvidar, como recuerda Martín, que el mayor crecimiento experimentado en meses anteriores está influenciado, en buena medida, por “el aumento de los precios de los recambios”, una tendencia en la que “se observa una desaceleración”.
De hecho, “en marzo, el IPC de los recambios aumentó un 2,8% respecto al año anterior, cifra que se asemeja a los incrementos salariales previstos y que podría generar tensiones en nuestras rentabilidades”, añade el secretario general de Ancera. Además, concluye, “es importante tener en cuenta el impacto de la Semana Santa en el primer trimestre de 2024, ya que el año anterior este evento tuvo lugar en el segundo trimestre”.
La rentabilidad, el principal caballo de batalla
En este contexto, la rentabilidad y la optimización logística son los dos principales retos para el sector, sin olvidar otros como la antigüedad del parque. Lo explica la presidenta de la patronal, Nines García de la Fuente: “Los desafíos de la distribución siguen centrados en la rentabilidad y la optimización logística. En este sentido, hemos observado un aumento de la demanda de información legislativa y sectorial. Y en esta línea, también comenzamos a ver resultados positivos de los informes que elaboramos en Ancera con el apoyo de la distribución. Además, destaca que “la antigüedad del parque y su impacto en la demanda, junto con la incertidumbre macroeconómica, son algunas de las principales preocupaciones de la distribución”.
El parque se vuelve mas viejo, los programas no encuentran los coches antiguos y los talleres no dan las referencias de las piezas…seguimos mejorando.