La transformación de la conducción hacia la automatización impulsa a los fabricantes de recambios a desarrollar tecnologías que acompañen dicha transformación. Es el caso de KYB, una de las más reconocidas marcas de amortiguadores a nivel mundial, y que ya se encuentra trabajando en un sistema integrado de amortiguadores y control de dirección asistida que busca contribuir a que la conducción automatizada sea cómoda y segura.
Gracias a la investigación de los ingenieros de la empresa nipona, KYB avanza en el desarrollo de un sistema de control integrado que logra una gestión avanzada del movimiento del vehículo, eliminando el balanceo (movimiento de rotación en el sentido del giro).
Esto se consigue gracias a una integración inteligente de información de la ruta de conducción con el sistema. A partir de las referencias del mapa junto con otros datos recopilados durante la conducción automatizada, el sistema predice los futuros movimientos y la vibración del vehículo, controlando la dirección asistida para conseguir una conducción óptima y sin balanceos.
En terrenos irregulares (escalones, badenes, baches), la vibración del amortiguador se emplea para predecir el balanceo del vehículo y la conducción asistida se controla para contrarrestar dicho balanceo.
El objetivo de esta nueva tecnología es conseguir una reducción del 50% en el balanceo, contribuyendo así a la reducción de los accidentes de carretera originados por baches y el sobreviraje resultante.