TAB, el campeón oculto

‘Hidden champions’ o ‘campeones ocultos’ es un término que define a esas empresas que sin ser especialmente grandes tienen gran éxito, incluso siendo líderes en sus nichos de mercado, pero que no tienen ese reconocimiento general. Es el caso del fabricante de baterías TAB, porque no habría duda si realmente se supiera cuántos de sus fabricados alimentan de energía el mundo. Y es que son más que fabricantes de baterías para automóviles, donde tienen ya mucha mayor presencia de la que se les supone. “Somos un fabricante integral de baterías”, presumen. Y en España se han organizado para hacerlo saber y crecer exponencialmente. Con Joan Alcaraz (59), director general, Miguel Pérez Schwarz (56), director ejecutivo, y Raúl Pacho (50), director comercial de la División de Arranque, hablamos de TAB, “el gran desconocido”…

Pasear por el almacén de TAB es darse cuenta de cuántas de sus baterías llegan al mercado con marcas de la distribución. Más de treinta etiquetas diferentes se distinguen. ¿Y por qué?: “Por producto, por confianza, por flexibilidad, por agilidad, por cercanía comercial…”. Una cuota de mercado difícil de medir pero que habla a las claras de la importancia del fabricante esloveno en el mercado de baterías, muy por encima de lo que se le reconoce.

Pero es que son mucho más, como expone su director ejecutivo Miguel Pérez: “TAB es un fabricante de baterías de arranque se podría decir que excepcional, porque somos uno de los pocos fabricantes integrales de baterías. Otros más grandes mueven mucho volumen en unidades, pero no ofrecen una gama tan completa como la nuestra, que sumamos a las de arranque las de tracción, semitracción, estacionaria, solar. Incluso la de moto, o no la ofrecen o no tienen nuestra gama. Y no es habitual tener tanto que ofrecer, que sin duda es un plus… porque se generan sinergias muy interesantes”.

Se refiere a que abre relaciones con los clientes más allá del producto habitual que les suministran. Lo explica el director general Joan Alcaraz: “Pensamos que las sinergias podíamos hacerlas realidad y que no fuera sólo un término para quedar bien. Y por ejemplo desarrollamos equipos de almacenamiento de energía solar destinados a la industria o naves comerciales. Y eso quiere decir que tenemos una cartera de clientes enorme, que son distribuidores, almacenes, grupos, a los que podemos ayudar a hacer más sostenibles sus instalaciones, reduciendo sus consumos. Y eso es un valor añadido. Hemos incorporado gente en plantilla para llevar a cabo todo el proyecto, contando después con un proveedor nacional de placas, de los más grandes de Europa, para su instalación. Y no sólo: la gran mayoría de nuestros clientes y muchos de los proveedores, si no todos, tienen carretillas elevadoras en sus almacenes. Pues nosotros no sólo les suministramos la batería sino que establecemos contratos de mantenimiento, porque tenemos servicio técnico y reparamos. Y hay muchas más sinergias…”. “Con las baterías de moto, por ejemplo”, apuntaba Miguel Pérez. “Hasta ahora era un producto accesorio que vendíamos a un par de clientes y a otros que te pedían de vez en cuando, cuando resulta que somos un país puntero y el mercado es enorme. La idea es crear una división mundial para moto desde España”, ampliaba Joan Alcaraz.

Y se han organizado…

“Viendo lo que teníamos, todas esas diferentes gamas, que podían dirigirse a diferentes mercados, decidimos dar un paso adelante y crear divisiones reales con responsables en cada una de ellas, asignándoles un objetivo concreto. Y tiene buena pinta, porque ¿qué cosas hoy en día no necesitan almacenar energía? El abanico de posibilidades cada vez es mayor y TAB es un grupo que fabrica infinidad de aplicaciones, así que nos pusimos en marcha”, comenzaba exponiendo Joan Alcaraz.

“No lo teníamos estructurado y de manera inconsciente nos paralizaba muchas cosas, porque por falta de tiempo no acababan de arrancar los proyectos. Hemos segmentado, estructurado, responsabilizado a personas, dándoles las herramientas y las armas para ponerse a funcionar. Y por eso hemos despegado, porque no hay nada que nos frene. Todos tenemos muy claro cuál es nuestra responsabilidad y globalmente sabemos dónde queremos ir. Somos una empresa que se nos reconoce por las baterías de arranque de coche y camión, pero no somos sólo eso. Cada vez estamos más sustentados por otras líneas de negocio y no precisamente porque se vendan menos baterías de arranque”, apuntaba Raúl Pacho.

“Pocos productos son tan versátiles como las baterías, y o bien te especializas o bien te diversificas. Y hemos optado por diversificarnos. Nuestro negocio natural sigue siendo el aftermarket, las baterías de coche y camión, pero siendo ese nuestro negocio creemos que podemos aportar mucho más a los clientes actuales, con soluciones que encuentran a través de varios proveedores y que con nosotros lo pueden simplificar”, reflexionaba Joan Alcaraz.

Las perspectivas no pueden ser mejores, como señalaba el director general: “Cuando fijamos los objetivos para 2023 tuvimos que repasarlos varias veces porque estábamos hablando de un crecimiento de más del cuarenta por ciento. Teníamos la sensación de que habíamos tocado techo, pero con esta reorganización hemos visto que no. Tenemos mucho margen de crecimiento. Espero sinceramente que se empiece a ver a TAB como lo que somos, una multinacional que tiene mucho que aportar”.

“Pensábamos que ese crecimiento era imposible, pero al ir analizando cada uno de los departamentos nos dábamos cuenta de que podía lograrse”, apuntaba Miguel Pérez. Y Joan Alcaraz lo concretaba: “Sólo en una de las divisiones que creamos, la solar, pasamos de facturar muy poco en 2021 a diez millones en 2022. Es algo que está en plena expansión y el crecimiento, claro, es exponencial. Y con las baterías de moto ocurre algo similar. Teníamos muy poca presencia y ahora, con la incorporación de una persona especifica procedente del sector y la nueva estrategia, vamos a incrementar la facturación de forma notoria. Y son plataformas elevadoras, carritos de golf, sillas de minusválidos… las posibilidades son enormes. Y no sé lo que venderemos con las gamas nuevas para estos vehículos, pero hasta ahora vendíamos cero. Vale que hay infinidad de empresas que se dedican a ello, pero también en nuestro mercado se atienden a clientes de este tipo y tienen que comprar a otro proveedor. Esa es la figura que queremos potenciar en el aftermarket, que para baterías, cualquier tipo de baterías, las que necesiten, estamos nosotros”.

El nombre clave

Pero si TAB se proyecta ahora como se proyecta tiene mucho que ver con la incorporación a su equipo directivo de Miguel Pérez, ex de ZF, el nombre clave: “Tenía la sensación de que contábamos con una empresa con mucho potencial, pero yo no daba más de sí. Se me escapaban cosas que no se me tenían que escapar, no atendía oportunidades que tenía delante… Necesitaba alguien con quien compartir la gerencia, que me ayudara a empoderar a gente con capacidad de decisión en la empresa para que asumiera mayores responsabilidades, que nos diera la fuerza para aprovechar la capacidad de desarrollo que yo pensaba que teníamos… Y cuando Miguel (Pérez) salió del sector buscando otros retos mantuvimos el contacto, y sabía que tenía ganas de volver. ¿Y a quién iba a encontrar yo con su capacidad, conocimiento, experiencia y reconocimiento profesional? El acuerdo para su incorporación fue muy fácil”, contaba Joan Alcaraz.

No podía estar más satisfecho con la decisión: “Al margen de los resultados, porque su incorporación todavía es reciente (primavera de 2022), estoy más que contento con lo que estamos consiguiendo. Nos hemos dado cuenta de que en todos los ámbitos que nos movemos tenemos mucho que hacer, mucho. Y ahora tenemos mayor disponibilidad para multiplicar nuestra presencia allí donde nos interesa estar. Estamos más ahí, y sólo por eso ya hemos conseguido cuentas nuevas. Tenemos una estructura pequeña para lo mucho que abarcamos, cincuenta y cinco personas para atender España, Portugal, el Magreb y toda Latinoamérica. Y nos habíamos centrado en crecer en almacén, administración… pero no en equipo directivo. Y ha sido un acierto”.

Raúl Pacho apuntaba además otro aspecto que consideraba importante: “La aportación de Miguel (Pérez), además de su conocimiento para manejar una empresa como la que manejaba, contribuyendo decisivamente a darle a TAB una mejor organización, haciéndola más eficiente, ha permitido ‘desatascar’ a Joan (Alcaraz), con más tiempo ahora para salir al mercado y, especialmente, para intensificar la relación con nuestra matriz, que nos está dando muy buenos resultados”.

Miguel Pérez contaba su versión: “Cuando llegué me encontré una empresa con muy buen ambiente, con un clima de confianza que facilitaba las cosas. Y como compañía me pareció que era más de lo que se le supone, que se la conoce poco. Me pareció que contaba con una base que con poco que hiciéramos podíamos tener mucho recorrido. Bastaba con estructurar, con organizar al equipo. Un equipo muy potente al que había que hacer que creyera en sí mismo. Tenemos el producto, una matriz con I+D… Todo lo necesario para hacer grandes cosas. Y con hilo directo con el presidente de la compañía, algo que a mí, acostumbrado a trabajar en empresas enormes, me sorprende muy gratamente, porque nos da una agilidad propia de las pequeñas empresas teniendo también las cosas buenas de una multinacional”.

Un cambio que creen que el mercado ha empezado a percibir: “Hemos ganado credibilidad, y sí, se nos escucha con mayor interés, eso ya lo hemos notado. Y estamos cerrando cosas con gente con la que hasta ahora no habíamos tenido la oportunidad de reunirnos”, afirmaba Raúl Pacho.